Un plato sencillo, lleno de sabor y texturas variadas que enriquecerá tu menú semanal. Ideal para quienes buscan incorporar más verduras en su dieta.
Ingredientes:
- 2 cabezas grandes de Brócoli
- 150 gr de Bacon
- 100 gr de Queso gorgonzola
- 1 Cebolla roja mediana
- 3 cucharadas de Aceite de oliva
- 1 cucharada de Vinagre balsámico
- 1 cucharadita de Miel
- 1 cucharadita de Mostaza de Dijon
- Sal
- Pimienta
Preparación
Comenzamos cocinando el brócoli en una olla grande con agua hirviendo, añadimos los floretes de brócoli y los dejamos cocer durante unos 3 minutos hasta que estén tiernos pero aún firmes.
Pasado ese tiempo, escurrimos y enjuagamos con agua fría para detener la cocción y mantener su color vibrante.
Mientras tanto, en una sartén a fuego medio, cocinamos el bacón hasta que esté bien dorado y crujiente.
Una vez dorado lo retiramos del fuego y lo colocamos sobre papel de cocina para eliminar el exceso de grasa.
Para la vinagreta, en un cuenco pequeño mezclamos el aceite de oliva, el vinagre balsámico, la miel y la mostaza de Dijon.
Salpimentamos al gusto y removemos bien para combinar todos los ingredientes.
En una ensaladera grande, mezclamos el brócoli escurrido, el bacón crujiente, el queso gorgonzola desmenuzado y la cebolla roja picada.
Añadimos la vinagreta y mezclamos todo cuidadosamente hasta que la ensalada esté bien impregnada del aderezo.
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