Ideal para tomar en cualquier situación, ya sea como segundo o como plato único en una cena informal, esta lasaña es muy fácil de realizar. Para que quede con una presentación perfecta, recuerda que debes cortar tanto las verduras como el pollo en daditos pequeños para que la mezcla sea más homogénea.
Ingredientes:
- 12 placas para lasaña
- 400 gr de pechugas de pollo
- 1 cebolla
- 1 zanahoria
- 1 calabacín
- 200 ml de tomate frito
- Orégano
- 100 gr de queso para gratinar
PARA LA BESAMEL
- 400 ml de leche
- 40 gr de harina
- 40 gr de mantequilla
- Nuez moscada
- Pimienta
- Cebollino
- sal
Preparación
Cocemos las placas de lasaña según las indicaciones del fabricante, las escurrimos y las reservamos.
Pelamos la cebolla y los ajos y los picamos. Raspamos la zanahoria y la picamos también. Despuntamos el calabacín, lo lavamos y lo partimos en cubitos. Limpiamos la pechuga, la secamos y la cortamos en daditos pequeños.
Calentamos una cazuela con aceite y rehogamos el ajo y la cebolla durante 7-8 minutos. Añadimos el calabacín y la zanahoria y rehogamos 5 minutos más.
Añadimos el tomate frito y el pollo, lo condimentamos con orégano, sal y pimienta y cocemos a fuego lento durante 10 minutos.
Fundimos la mantequilla en un cazo y tostamos en ella la harina durante un minuto. Vertemos la leche caliente, añadimos sal, pimienta y nuez moscada y cocemos a fuego lento y removiendo hasta que espese la besamel.
Untamos una fuente de hornear con aceite y vamos formando capas, alternando las placas de lasaña y el relleno de pollo.
Cubrimos con la besamel y con el queso y horneamos 45 minutos a 180º C.
Servimos con el cebollino picado.
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