La mayoría de las veces solemos hacer puré de patatas o patatas fritas como guarnición o acompañamiento, pero, hay otra receta deliciosa, fácil y relativamente rápida que puedes hacer.
Ingredientes:
- 100 gr de queso parmesano en un trozo
- 80 gr de queso cheddar
- mantequilla
- aceite de oliva
- Sal
- pimienta
Para la bechamel
- 20 gr de harina
- 20 gr de mantequilla
- nuez moscada
Preparación
Pelamos las patatas, las lavamos y cortamos como si fueras a hacer rodajas pero sin llegar hasta el fondo.
Cortamos el parmesano en láminas finas y las introducimos en los cortes de las patatas, intercalándolas con trocitos de mantequilla.
Colocamos las patatas en una fuente refractaria, las salpimentamos y las regamos con un chorrito de aceite. Las hornéamos a 190° C durante unos 45 minutos.
Mientras, calentamos la mantequilla en una cacerola, agregamos la harina y la tostamos, removiendo constantemente. Vertemos la leche, poco a poco y sin dejar de remover, salpimentamos, condimentamos con una pizca de nuez moscada y cocemos unos 10 minutos, o hasta que espese.
Transcurrido el tiempo de cocción de las patatas, vertemos un par de cucharadas de bechamel sobre cada una, espolvoreamos con un poco de queso cheddar rallado y gratinamos hasta que el queso esté fundido.
Las sacamos del horno y servimos enseguida.
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