Este es un puchero de los de cocinar a fuego lento, sin prisa, sabrosísimo y muy saludable y como todavía queda invierno por delante hay que aprovechar para disfrutar en casa de reconfortantes platos de cuchara.
Ingredientes:
- 300 gr de Alubias blancas secas
-1 Cebolla dulce grande
- 3 Dientes de ajo
- 1 Apio
- 3 Tomates frescos o en conserva
-1 cucharadita de Pimentón dulce
- 1/2 cucharadita de Comino molido
- 1 Zanahoria
- 500 gr Calabaza pelada
- 3 Patatas medianas
-1 l de Caldo de verduras o agua
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal
- Pimienta negra
Preparación
Hay que dejar a remojo las alubias secas como mínimo unas 8 horas, mejor si son 10-12, en el caso de las más grandes. Lavamos, enjuagamos y colocamos en un recipiente amplio cubiertas con abundante agua fría. Transcurrido el tiempo, enjuagaremos desechando el agua.
Lavamos las patatas, el apio, la zanahoria y los tomates.
Pelamos la cebolla y los dientes de ajo, y picamos finos junto con el apio.
Pelamos la calabaza, la zanahoria y las patatas. Cortamos la calabaza en cubos, dejando piezas más grandes para que no se deshaga del todo durante la cocción. Troceamos la zanahoria.
Calentamos un poco de aceite de oliva en una cazuela o en una olla grande y pochamos la cebolla con el ajo y el apio, añadiendo una pizca de sal.
Mantenemos el fuego suave para que no se queme. Cuando estén dorados, agregamos los tomates rallados o en conserva, damos unas vueltas y agregamos el pimentón y el comino, removiendo todo bien.
Incorporamos la zanahoria y la calabaza, removemos bien y echamos las alubias. Cubrimos con caldo o agua, agregamos las patatas cascadas (haciendo un corte con un cuchillo y troceándolas del todo usando las manos) y una pizca de pimienta negra.
Llevamos a ebullición, añadimos un poco más de caldo o agua fría para "asustarlas" y dejamos que vuelvan a hervir.
Bajamos el fuego, tapamos y dejamos cocer como mínimo dos horas. Asustándolas de vez en cuando y removiéndolas con suavidad y vigilamos el nivel de líquido.
Comprobamos el punto de la alubia para que tampoco quede demasiado blanda. Al final de la cocción, machacamos un poco la calabaza si se desea para espesar aún más el guiso. Corregimos el punto de sal y pimienta.
Servimos caliente
No hay comentarios:
Publicar un comentario