𝗟𝗮 𝗴𝗮𝘀𝘁𝗿𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮 𝗲𝘀 𝗲𝗹 𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗽𝗿𝗲𝗽𝗮𝗿𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝘂𝗻𝗮 𝗯𝘂𝗲𝗻𝗮 𝗰𝗼𝗺𝗶𝗱𝗮. 𝗟𝗮 𝗽𝗮𝗹𝗮𝗯𝗿𝗮, 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝘁𝗮𝗹, 𝗽𝗿𝗼𝘃𝗶𝗲𝗻𝗲 𝗱𝗲𝗹 𝗴𝗿𝗶𝗲𝗴𝗼 𝝲𝝰𝞂𝞃𝞀𝝾𝝼𝝾𝝻𝝸́𝝰 (𝗴𝗮𝘀𝘁𝗿𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮). 𝗟𝗮 𝗴𝗮𝘀𝘁𝗿𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮 𝘀𝗲 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗻𝗲 𝗱𝗲 𝘂𝗻 𝗰𝗼𝗻𝗷𝘂𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗰𝗼𝗻𝗼𝗰𝗶𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀 𝘆 𝗽𝗿𝗮́𝗰𝘁𝗶𝗰𝗮𝘀 𝗿𝗲𝗹𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗱𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗻 𝗲𝗹 𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗰𝘂𝗹𝗶𝗻𝗮𝗿𝗶𝗼, 𝗹𝗮𝘀 𝗿𝗲𝗰𝗲𝘁𝗮𝘀, 𝗹𝗼𝘀 𝗶𝗻𝗴𝗿𝗲𝗱𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀, 𝗹𝗮𝘀 𝘁𝗲́𝗰𝗻𝗶𝗰𝗮𝘀 𝘆 𝗹𝗼𝘀 𝗺𝗲́𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀, 𝗮𝘀𝗶́ 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝘀𝘂 𝗲𝘃𝗼𝗹𝘂𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗵𝗶𝘀𝘁𝗼́𝗿𝗶𝗰𝗮 𝘆 𝘀𝘂𝘀 𝘀𝗶𝗴𝗻𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗰𝘂𝗹𝘁𝘂𝗿𝗮𝗹𝗲𝘀.


Cocinar es una actividad que permite unir a la familia en torno a la cocina y a la mesa, preparar platos diversos y aprovechar el tiempo libre en una actividad provechosa. Cocinar pone a prueba tu habilidad, tu creatividad y la capacidad de innovar. La gastronomía va más allá de comer; se trata de una actividad que tiene una historia y hace parte de la cultura.

Patatas bravas de Chicote

Son muchas las salsas bravas que existen para acompañar las famosas patatas bravas, típica tapa de la gastronomía española. También son muchos los cocineros que tienen sus propias recetas de salsa brava, como es el caso del famoso y controvertido cocinero Alberto Chicote.



Ingredientes:


- 1 k de patatas
- 500 ml de aceite de oliva
- 7 dientes de ajos
- 1 cebolla
- 2 chiles
- 1 pimiento choricero
- 250 gr de tomate natural triturado
- 60 ml de vinagre blanco
- 1 cucharada sopera de pimentón picante
- 1 punta o hueso de jamón
- 1 cucharadita de orégano seco
- 1 pizca de comino


Preparación



Pelamos, lavamos y secamos las patatas. Las cortamos en cachelos, chascando los trozos, metiendo el cuchillo y luego partiendo para que suelten el almidón a la hora de cocinarlas.

Ponemos el aceite de oliva en una sartén amplia y lo calentamos. Cuando el aceite esté listo, freímos las patatas unos 10 minutos a fuego no muy fuerte. Las patatas se tienen que hacer, pero no dorarse.

Cuando estén tiernas, retiramos las patatas en un plato con papel absorbente y reservamos.

Ahora, vamos con la preparación de la salsa brava de Chicote. Para ello, pelamos los dientes de ajo y la cebolla. Cortamos los ajos por la mitad y picamos la cebolla en trozos no muy pequeños. Retiramos las semillas de los chiles y los partimos.

En una olla ponemos un poco de aceite de oliva (reutiliza el mismo que has usado para freír las patatas). Ponemos suficiente aceite para cubrir el fondo de la olla y lo calentamos. Freímos los ajos, la cebolla y los chiles. Tardaremos unos cinco minutos.

Incorporamos la carne del pimiento choricero, el vinagre, la punta de jamón, el pimentón picante y el tomate triturado. Tapamos la olla y dejamos cocer a fuego medio unos 10 minutos.

Una vez cocido, probamos la salsa, tal vez necesite un poco de sal, o esté un poco ácida por el tomate, por lo que habrá que añadirle un poco de azúcar. Retiramos la punta de jamón y pasamos la salsa brava al vaso de la batidora y trituramos.

Cuando vayamos a servir las patatas, ponemos un poquito de aceite en una sartén y doramos las patatas, lo justo para que tomen color mientras le vamos dando vueltas con cuidado de que no se rompan y tomen color de manera uniforme.

Añadimos tres cucharadas soperas de la salsa y vamos moviendo con cuidado para que las patatas se vayan impregnando de la salsa. Vamos añadiendo más salsa brava hasta que tenga la consistencia que más nos guste.

Por último, añadimos el orégano y una pizca de comino. Revolvemos bien.

Servimos las patatas bravas de Chicote enseguida para que no se enfríen.

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