𝗟𝗮 𝗴𝗮𝘀𝘁𝗿𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮 𝗲𝘀 𝗲𝗹 𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗱𝗲 𝗹𝗮 𝗽𝗿𝗲𝗽𝗮𝗿𝗮𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗱𝗲 𝘂𝗻𝗮 𝗯𝘂𝗲𝗻𝗮 𝗰𝗼𝗺𝗶𝗱𝗮. 𝗟𝗮 𝗽𝗮𝗹𝗮𝗯𝗿𝗮, 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝘁𝗮𝗹, 𝗽𝗿𝗼𝘃𝗶𝗲𝗻𝗲 𝗱𝗲𝗹 𝗴𝗿𝗶𝗲𝗴𝗼 𝝲𝝰𝞂𝞃𝞀𝝾𝝼𝝾𝝻𝝸́𝝰 (𝗴𝗮𝘀𝘁𝗿𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮). 𝗟𝗮 𝗴𝗮𝘀𝘁𝗿𝗼𝗻𝗼𝗺𝗶́𝗮 𝘀𝗲 𝗰𝗼𝗺𝗽𝗼𝗻𝗲 𝗱𝗲 𝘂𝗻 𝗰𝗼𝗻𝗷𝘂𝗻𝘁𝗼 𝗱𝗲 𝗰𝗼𝗻𝗼𝗰𝗶𝗺𝗶𝗲𝗻𝘁𝗼𝘀 𝘆 𝗽𝗿𝗮́𝗰𝘁𝗶𝗰𝗮𝘀 𝗿𝗲𝗹𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗮𝗱𝗮𝘀 𝗰𝗼𝗻 𝗲𝗹 𝗮𝗿𝘁𝗲 𝗰𝘂𝗹𝗶𝗻𝗮𝗿𝗶𝗼, 𝗹𝗮𝘀 𝗿𝗲𝗰𝗲𝘁𝗮𝘀, 𝗹𝗼𝘀 𝗶𝗻𝗴𝗿𝗲𝗱𝗶𝗲𝗻𝘁𝗲𝘀, 𝗹𝗮𝘀 𝘁𝗲́𝗰𝗻𝗶𝗰𝗮𝘀 𝘆 𝗹𝗼𝘀 𝗺𝗲́𝘁𝗼𝗱𝗼𝘀, 𝗮𝘀𝗶́ 𝗰𝗼𝗺𝗼 𝘀𝘂 𝗲𝘃𝗼𝗹𝘂𝗰𝗶𝗼́𝗻 𝗵𝗶𝘀𝘁𝗼́𝗿𝗶𝗰𝗮 𝘆 𝘀𝘂𝘀 𝘀𝗶𝗴𝗻𝗶𝗳𝗶𝗰𝗮𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝗰𝘂𝗹𝘁𝘂𝗿𝗮𝗹𝗲𝘀.
Cocinar es una actividad que permite unir a la familia en torno a la cocina y a la mesa, preparar platos diversos y aprovechar el tiempo libre en una actividad provechosa. Cocinar pone a prueba tu habilidad, tu creatividad y la capacidad de innovar. La gastronomía va más allá de comer; se trata de una actividad que tiene una historia y hace parte de la cultura.

Pasteles de salmón




Para esta receta lo ideal es utilizar un trozo de lomo, sin espinas, al que solo desecharemos la piel una vez ya cocinado. 







Ingredientes:




- 500 gr de patatas, para cocer
- 175 gr de salmón
- 20 gr de harina de trigo
- 1 limón
- Perejil fresco
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal al gusto
- Pimienta negra molida al gusto




Preparación 





Pelamos las patatas y las cortamos en cuartos.

 En una cazuela, ponemos abundante agua a hervir.

 Coceremos las patatas unos 20 minutos, hasta que estén tiernas. 
Salamos al gusto.

Cortamos el salmón en trozos. Lo colocamos sobre papel aluminio, cerrando haciendo un paquetito. 

Vamos a aprovechar el calor de la cazuela para cocinar al vapor el pescado. Apoyamos un colador grande en la olla donde cocemos las patatas, sobre el nuestro paquete con el salmón. Cocinamos unos 10 minutos.

Pasado el tiempo, retiramos y abrimos el papillote. 

Dejamos atemperar un poco, retiramos la piel del salmón y reservamos.

Cocidas las patatas, escurrimos y las pasamos a un bol grande. Las machacamos con un tenedor o similar, también valdría que uséis un pasapuré.

Picamos el perejil fresco, bien fino. 

Desmenuzamos el salmón, comprobando si hay alguna espina perdida o un trozo de piel olvidado.

A continuación vamos incorporando el resto de ingredientes, sal y pimienta negra al gusto, perejil, ralladura de limón, y finalmente la harina.

 Mezclamos bien, volviendo a machacar si es preciso, para que quede todo bien integrado.

Cogemos un poco de puré, le damos forma con las manos, formando nuestros pasteles redondos, de unos 2 centímetros de grosor. 

Repetimos el proceso con el resto del puré. Una vez hechos todos los pasteles de salmón, cubrimos con film transparente, dejándolos al menos 1 hora en la nevera. 

Así cogen la consistencia necesaria antes de cocinarlos.  

En una sartén, con una lámina de aceite de oliva virgen extra, freímos los pasteles de pescado.

 Vuelta y vuelta, hasta que estén dorados por ambos lados. Retiramos, dejando escurrir el exceso de aceite sobre papel de cocina absorbente. 

Servimos enseguida.




No hay comentarios:

Publicar un comentario