Esta sopa de puede servir gratinada, para ello reparte sobre ella rebanadas de pan tostado, espolvoréala con queso rallado y dóralo bajo el grill del horno unos minutos.
Ingredientes:
- 8 cebollas
- 200 ml de vino blanco
- 2 pastillas de concentrado de caldo
- 1 ramita de tomillo
- 50 gr de mantequilla
- queso rallado
- perejil picado
- tostaditas de pan
- aceite
- sal
- pimienta
Preparación
Calentamos 2 litros de agua en una cacerola y disolvemos en ella el concentrado de caldo. No es necesario que hierva. Pelamos las cebollas y las córtamos en tiras.
Calentamos la mantequilla y 1 cucharada de aceite en una cacerola, incorporamos la cebolla y la rehógamos a fuego medio, removiendo de vez en cuando, hasta que esté dorada. Cuanto más dorada quede la cebolla, más oscura resultará la sopa.
Vertemos el vino y, cuando empiece a hervir, agregamos el tomillo y el agua.
Llevamos de nuevo a ebullición, bajamos el fuego y dejamos cocer lentamente durante 1 hora y media.
Pasado este tiempo retiramos la ramita de tomillo, salamos la sopa y la condiméntamos con una pizca de pimienta.
La repartimos en platos hondos y la servimos bien caliente, espolvoreada con un poco de queso rallado y perejil picado.
Acompañamos con tostaditas.
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