La versión más conocida de esta receta es la que utiliza solomillo de ternera envuelto con una capa de hojaldre, pero también se puede preparar con salmón, pato, pollo o cerdo. Parece más dificultoso que lo que en realidad es.
Ingredientes:
- 4 pechugas de pollo
- 1 lámina y 1/2 de hojaldre rectangular
- 100 gr de paté
- 1 cebolla roja mediana
- 1/2 vaso de vino tinto
- 1/2 puerro
- 1 zanahoria
- 1 patata
- aceite
- sal
- pimienta
Preparación
Precalentamos el horno a 200º C. Pelamos la cebolla y la córtamod en tiras finas. Calentamos una sartén con un poco de aceite, doramos las pechugas de pollo por todos lados y cuando estén doradas las retíramos.
Añadimos la cebolla a la sartén y la saltéamos un par de minutos. Vertemos el vino y lo cocemos hasta que se haya reducido casi todo.
Regresamos las pechugas a la sartén, dejamos que tomen sabor un par de minutos y las escúrrimos.
Cuando tengamos las pechugas escurridas, las ábrimos en forma de libro y las rellénamos con el paté y la cebolla también escurridos.
Cortamos el hojaldre en cuatro rectángulos, colocamos las pechugas encima y las enróllamos. Pintamos Cerramos los bordes y las pintamos con un huevo batido. Metemos en el horno y hornéamos unos 30 minutos.
Mientras, cocemos las verduras de la guarnición y las saltéamos con mantequilla.
Servimos las pechugas Wellington acompañadas de las verduritas.
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