Es un postre elaborado a base de azúcar, leche, café, yemas de huevo, gelatina y nata. Fácil y rápido de hacer, sin hornear en el horno, es ideal para las meriendas del día o al final de una comida.
Ingredientes:
- 4 yemas de huevo
- 150 ml de café solo concentrado
- 200 ml de leche
- 100 gr de azúcar
- 15 gr de hojas de gelatina
- 400 ml de nata montada
Preparación
Remojamos las hojas de gelatina en agua fría durante unos 10 min.
En un bol, trabajamos las yemas de huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla espumosa y homogénea.
Vertemos la leche caliente en la mezcla. Removemos y devolvemos todo a la cacerola. Ponemos a fuego lento, agregamos la gelatina bien escurrida escurrida y llevamos a ebullición, revolviendo constantemente.
Retiramos del fuego, añadimos el café muy fuerte y dejamos enfriar. Agregamos suavemente la nata montada a la mezcla, haciendo movimientos lentos hacia arriba y hacia abajo con una espátula.
Vertemos todo en un molde húmedo. Y lo metemos en la nevera. Refrigeramos por al menos 2 h.
Servimos adornada con el resto de la nata montada y unos granos de café.
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